¡Mil gracias a la autora por el ejemplar!

Me ha parecido un libro de lo más guay. ¿Por qué? Pues porque tiene todo lo que me gusta. Además es sorprendente y muy original, cosa que suma más puntos aun.

La verdad, no me esperaba encontrarme con una historia tan peculiar y única. He de deciros que al principio me recordaba a mi infancia cuando leía a Enyd Blyton (no a Los cinco, sino a Él árbol mágico o Lejano). Sobre todo por los tiernos nombres que le da la autora a los fantasmas e incluso a la araña. Luego me recordó a Alicia en el país de las maravillas por esa "aventura" a otro mundo y finalmente a Narnia, por ese otro mundo que parece incluso mágico y por el tema de armaduras, etc.

Pero no se trata de un libro solamente infantil. No, la pluma de la autora es muy madura y bien cuidada, hace que sea un libro especial que podría leerse para todos los públicos, incluso para adultos. Yo he disfrutado un montón de esta historia, como una niña pero a la vez como una adulta. 

Aunque no se trata de una historia infantil por así decirlo, ya no solo por lo de la pluma sino también por la trama. Hay escenas duras y algunas que incluso dan algo de miedo.

A mí me sorprendió todo, sobre todo cuando la trama avanza más y de pronto gira hacia un hecho de lo más emocionante (La Puerta). También te deja con la boca abierta con algunas escenas y giros que hacen que no lo esperes para nada. Tiene cierto toque de misterio que hace que quieras revelar todo lo que envuelve a La Puerta y sus "habitantes".

Y ya sabéis que me encanta que me sorprendan.

Los personajes son tan "vivos" aunque la mayoría son fantasmas, los sientes muy cercano e incluso divertidos. Son personajes que a mi parecer la pluma de la autora los mima, les otorga dulzura y te encariñas mucho con ellos (¡incluso con la araña!).

La historia comienza en una casa, tiempo atrás, donde se muda una nueva familia. Pero no vivirán solos, sino que el desván viven unos habitantes muy peculiares: fantasmas. Pero en este libro me ha encantado que los fantasmas no fueran malos, sino buenos (exceptuando un personaje misterioso que se trata de un asesino). Uno de los fantasmas intenta por todos los medios proteger a la familia y pronto surgirá una peculiar amistad con los niños de la casa.

No cuento más, porque la trama avanza rápido, quedas enganchado y no se hace nada pesado. Yo devoré el libro en unos días.

Su final me ha gustado peroooo, me dejó con muchísimas ganas de más. Sobre todo porque terminar de una manera un tanto abierta, una forma de decir que podría continuar y seguir sabiendo qué les pasará a los personajes. Esto hizo que terminara el libro con emoción pero al mismo tiempo cierta tristeza, dado que quería leer más jajaja. Es buena señal, ha sido una historia entrañable del que cuesta separarse.

Sin duda, si os gustan las historias de fantasmas, aventuras y muchas sorpresas, seguro que os encantará este libro.

"Un libro peculiar y único.