Una segunda parte muy especial y bonita.

¿Quién dijo que las segundas partes no eran tan buenas como las primeras?

Anny ha logrado sorprenderme de nuevo con una historia de amor preciosa y muy distinta.

Esta vez conoceremos el punto de vista de dos protagonistas que fueron muy cercanos a los del primer libro: Guille y Laura.

Laura, ya en el primer libro vimos que fue atropellada y tuvo un terrible accidente.

Guille, el mejor amigo de Emma, le hará el favor a su amiga de cuidar de Laura aunque no la conozca de nada. 

Pronto surgirá algo especial entre Laura y él. No se tratará de un "amor a primera vista" sino algo mucho más profundo. Me encanta cómo se desarrolla todo al principio y me emocioné tanto que Anny logró que se me salieran algunas lágrimas. Fue precioso y muy emotivo, disfrutando de la relación que surgía entre estos dos personajes tan especiales.

Perooo..., sí hubo algo que me dejó como fría y extraña. Hay muchos momentos de tensión y muchos momentos tristes, alejados el uno del otro. Esto hizo que la comedia se me volviera un poco triste y que las sonrisas y momentos preciosos compartidos entre los personajes se me hicieran como algo muy muy lejano, queriendo que volvieran a estar como antes. Me apenó el desarrollo de todo. Es cierto que hace que sea más intenso y sorprendente, sin saber si volverán a estar juntos y cuándo lo harán. Me desesperaba un poco porque tenía ganas de entrar en el libro y decirle sobre todo a Guille que espabilara y estuviese junto a Laura da igual lo que pasara, por encima del orgullo y de cualquier otra cosa. Así de metida estaba en la historia. Y además, Anny lo hizo bastante realista, como el amor mismo que muchas veces no es perfecto y que (más bien las personas lo complican todo) hay que superar muchos obstáculos.

La autora ha hecho que sufra bastante pero me dio un merecido final que me gustó aunque se acelerara todo bastante rápido, impidiéndome disfrutar del todo de ese romance.

En la trama también harán aparición muchos otros personajes del primer libro que disfruté volver a "verlos" y seguir de cerca sus historias, sobre todo la de Iker y Dani, una pareja gay que siempre logran sacarme sonrisas.

En resumen, el libro lo devoré rápidamente, disfrutando del principio del romance y sufriendo a lo largo de toda la trama, sintiéndolo todo muy intenso.

Si os gustó el primer libro sin duda os gustará éste.

"Una segunda parte muy intensa, emotiva y preciosa pero con muchas lágrimas."